martes, 3 de junio de 2008 | |

El Agente Morboso
Rowena Bali. Edit UACM y Colofón
TXT Javier Moro



Un tránsfuga sexual esta en busca de la mujer de sus sueños. Y lo consigue al encontrarse con la mujer perfecta, la “Dama del Lago”, quién es, sin embargo perfecta solo gracias a sus múltiples cirugías estéticas. Para alcanzarla nuestro personaje tendrá que convertirse en hombre, pero no en cualquiera, en el más perfecto, en el más bello. Y lo logra. Después de castrar a un hombre y a un caballo. Pero su logro no le alcanza para retener a su mujer.

Una novela que se interna en los fríos territorios de la belleza perfecta, lograda a base de largas horas en los gimnasios, en los spas y en las mesas de operación. Una novela que se interna por ese incierto territorio de la belleza ideal, de esa belleza creada más por los estereotipos vendidos por los medios masivos de comunicación que por la vida real y cotidiana. Una novela interesante, que nos descubre a una gran observadora de la vida mexicana en su autora, Rowena Bali.

¿Qué vemos cuando vemos a una de nuestras grandes estrellas del pop? ¿Cirugías o belleza natural? ¿Adónde nos lleva esta obsesión por la belleza perfecta? Un mundo demasiado superficial en el cuál no entramos los hombres y mujeres de carne y hueso.

Rowena Bali es una joven escritora mexicana, que nos sorprende con esta novela, pues aborda temas de una actualidad escabrosa, molesta, pero que estan ahí y que no podemos dejar pasar. Una escritora arriesgada, eso es cierto, que nos lleva de la mano a un mundo tan asombroso como cotidiano. Un mundo en donde el ideal de la belleza, dejó de ser hace mucho tiempo ese ideal de perfección del ser humano, tal cuál lo entendían los antiguos griegos, para convertirse en un ideal superficial: lo que importa es la envoltura, la superficie, nada más.

Nip Tuck, Second Life, bulimia, anorexia, la “tetanic”, Britney Spears; todos íconos de la cultura pop con los cuáles tenemos que convivir millones de mexicanos, que por suerte ( o por desgracia, vaya uno a saber) nos encontramos completamente lejanos de esos estándares y estereotipos. Sin embargo dichos estereotipos cunden con fuerza y buscan atraparnos en esa ola de consumismo, que al igual que al personaje principal de la novela “El Agente Morboso” pueden llevarnos hasta la perdida de nuestra identidad, y en último caso, a la locura. ¿La locura del consumista? Sí, tal vez. La locura de aquel que no alcanza su anhelo. Por más que ese anhelo sea pura superficie, pura imagen, mero espejismo.

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